Confirmados los análisis sobre el discurso del libro de Lewis Carroll (Charles Lutwidge Dodgson) Alicia en el país de las maravillas, me dejó planteado lo siguiente:
En el libro se presentan diferentes cuestiones a las que nos vemos sometidas las personas en cada una de las etapas de la vida. Pese a que la sucesión de hechos son puestos en ridículo por el autor, alegando fantasía, es difícil terminar de entender el significado final (si es que es la intención del autor transmitir significado alguno).
Como personas que somos, desarrolladas en una sociedad (no esta determinado claramente para mi aún, si es por necesidad o por naturaleza que nos conformamos en sociedades), nos enfrentamos diariamente a distintos dilemas. Alicia ni bien se encuentra en ese mundo de fantasía, se ve en la tarea de adquirir el tamaño necesario para atravesar una puerta que la lleva a un jardín. En primer termino el ser muy grande le impide alcanzar dicho lugar, una vez logrado el tamaño adecuado, está imposibilitada a alcanzar la llave que abre la puerta (que se encuentra sobre una mesa de tamaño colosal con respecto al tamaño suyo). Aquí se hace presente una cuestión personal, y a su vez social (ya que muchas de nuestros comportamientos son juzgados por el conjunto de la sociedad), la cuestión del tamaño o la edad física, intelectual, mental en la cual nos encontramos con relación a lo que deseamos hacer.
Cuando para ciertas cosas nos sentimos lo suficientemente capacitados, para otras no nos consideramos (o no nos consideran) que lo estamos.
Tema aparte acredita las convenciones del autor con referencia a su pedofilia, su amistad con niñas y su hobbie de fotografiar pequeñas con vestidos rotosos (o sin ellos). Esta visión sobre estos comportamientos abriría una explicación más profunda a ciertos sucesos del libro... pero como dije, es tema de análisis mas profundo.
En fin, lo que representa ese mundo de fantasía es, también, a cada una de los factores de los cuales la niña siente opresión: el autoritarismo de un soberano (la reina que condena a muerte constantemente a su antojo a todos y por nada), a la presión por cierto versos o poesías victorianas que tuvo que memorizar en su vida (quizás –no lo sé- en referencia a los sistemas de educación –la familia y la escuela-), a los caminos que tiene que tomar para llegar a lugares inesperados (destinos errantes o desconocidos), pero a los cuales siente que tiene que llegar, y personalmente creo que también se manifiesta su sentimiento de estar sometida a la “coherencia”, ¿es Alicia cuerda en un país de locos o loca en un país de cuerdos?
A modo de conclusión utilizo una frase que encontré por ahí con relación a como llega Alicia al mundo subterráneo de la fantasía: “Perseguir un Conejo Blanco no es difícil, difícil es liberarse de su persistente y obsesivo mecerse”.
En el libro se presentan diferentes cuestiones a las que nos vemos sometidas las personas en cada una de las etapas de la vida. Pese a que la sucesión de hechos son puestos en ridículo por el autor, alegando fantasía, es difícil terminar de entender el significado final (si es que es la intención del autor transmitir significado alguno).
Como personas que somos, desarrolladas en una sociedad (no esta determinado claramente para mi aún, si es por necesidad o por naturaleza que nos conformamos en sociedades), nos enfrentamos diariamente a distintos dilemas. Alicia ni bien se encuentra en ese mundo de fantasía, se ve en la tarea de adquirir el tamaño necesario para atravesar una puerta que la lleva a un jardín. En primer termino el ser muy grande le impide alcanzar dicho lugar, una vez logrado el tamaño adecuado, está imposibilitada a alcanzar la llave que abre la puerta (que se encuentra sobre una mesa de tamaño colosal con respecto al tamaño suyo). Aquí se hace presente una cuestión personal, y a su vez social (ya que muchas de nuestros comportamientos son juzgados por el conjunto de la sociedad), la cuestión del tamaño o la edad física, intelectual, mental en la cual nos encontramos con relación a lo que deseamos hacer.
Cuando para ciertas cosas nos sentimos lo suficientemente capacitados, para otras no nos consideramos (o no nos consideran) que lo estamos.
Tema aparte acredita las convenciones del autor con referencia a su pedofilia, su amistad con niñas y su hobbie de fotografiar pequeñas con vestidos rotosos (o sin ellos). Esta visión sobre estos comportamientos abriría una explicación más profunda a ciertos sucesos del libro... pero como dije, es tema de análisis mas profundo.
En fin, lo que representa ese mundo de fantasía es, también, a cada una de los factores de los cuales la niña siente opresión: el autoritarismo de un soberano (la reina que condena a muerte constantemente a su antojo a todos y por nada), a la presión por cierto versos o poesías victorianas que tuvo que memorizar en su vida (quizás –no lo sé- en referencia a los sistemas de educación –la familia y la escuela-), a los caminos que tiene que tomar para llegar a lugares inesperados (destinos errantes o desconocidos), pero a los cuales siente que tiene que llegar, y personalmente creo que también se manifiesta su sentimiento de estar sometida a la “coherencia”, ¿es Alicia cuerda en un país de locos o loca en un país de cuerdos?
A modo de conclusión utilizo una frase que encontré por ahí con relación a como llega Alicia al mundo subterráneo de la fantasía: “Perseguir un Conejo Blanco no es difícil, difícil es liberarse de su persistente y obsesivo mecerse”.
Les recomiendo que lean el libro y encuentre sus conclusiones personales. Aunque es muy bueno leer (si se consiguen acá) las versiones comentadas por personas que saben (y no como yo que sólo doy una opinión de principiante).
2 comentarios:
letras... espiralados signos de una trama que se deja ser sin más... entre laberintos los humanos transitan(mos), como Alicia, en la constante imposibilidad de sabernos adultos/niños, deslizándonos en dimensiones que el otro no sabe (ni podrá hacerlo jamás), como las letras que narran la vida de Alicia, somos innumerables signos, danzando al compás de los sentidos de algo que nunca entenderemos... a pesar de todo...
me acuerdo que me contaste algo de este libro hace poco, me sorprende cada vez más la cantidad de cosas que se esconden entre las palabras, y creo cada vez con más seguridad de que es muy bueno compartir opiniones interpretaciones y todas son válidas, hasta las de un principiante, todas nos hacen ver algo nuevo, algo más, nos enseñan...
prometo seguir tu consejo y leer este libro... je...
te quiero amigoo!
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