viernes, 30 de noviembre de 2007

Crónica de la moneda de un peso

Hace un tiempo que las líneas de colectivos solo aceptan monedas, es por eso que debido a la crisis que esto provocó a los comerciantes y a cualquier persona que necesite cambio, se solicito a las empresas de transporte que dieran una opción de pago.

Es así como aparecieron los cospeles (que equivalen a un viaje) y las tarjetas de colectivos de diferentes montos. Estas alternativas iba a suponer que el transito de monedas en los comercios y en los demás rubros se iba a mejorar pero no fue así.

Es un problema que cada tantos meses vuelve a aparecer y genera los imprevistos que conocemos, motiva enojos y posibilita abusos.
Si bien hay rumores de que ciertas organizaciones empresariales buscan lucrar con esta escasez vendiendo paquetes de monedas (sacando 200 pesos de diferencia + 5 pesos por bolsa entregada), estos no dejan de ser rumores y nadie tiene respuestas ante los reclamos.

Justamente salió un comunicado de las empresas que utilizan tarjetas magnéticas, debido a los problemas de funcionamiento que tuvieron los usuarios de las mismas. Una partida de 200.000 unidades (esto equivales a 2 meses de demanda), vino fallada de fábrica y las maquinas que expenden el boleto no las reciben. El problema es que la demanda no se puede recuperar hasta dentro de 20 días y esta es la única distribuidora de tarjetas magnéticas en América Latina.

Es por eso que a partir de hoy a la mañana se están realizando los cambios de las tarjetas a los usuarios afectados.Si bien es un tema de actualidad en la ciudad, me identificó a mi particularmente, gracias a las 15 cuadras que me tuve que caminar ayer, kiosco por kiosco, buscando monedas para poder volver a mi casa.

Fuente: ellitoral.com

jueves, 29 de noviembre de 2007

Crónica del cubo Rubik

Gracias a investigaciones de científicos estadounidenses me acabo de enterar que mi intelecto (en una de sus posibilidades súper potenciadas) tiene la capacidad de resolver en solo 26 movimientos, el famoso cubo que fue inventado por el escultor y profesor de arquitectura húngaro Ernö Rubik en 1974 (el de los cuadraditos de colores).
Resulta que estos tipos, con la ayuda de una máquina muy sofisticada, no hicieron más que programarla para que lo resuelva en la menor cantidad de movimientos que se pueda. Y uno que se mata intentando mover un solo cuadradito de color, sin que se muevan las 5 caras restantes.
Me acuerdo cuando lo compre, fue la única vez que lo pude observar con sus caras completas, cada una con su color correspondiente. Es que ni bien lo saqué del paquetito en el que venía, tuve la brillante idea de girarle las caras de colores con los ojos cerrados y después intentar rearmarlo, con la ayuda de mi apreciada materia gris.
El otro día lo encontré así... exactamente así de igual, que cuando le giré las caras después de comprarlo. Pobre, debe estar esperando todavía que una mente brillante lo resuelva...
El “brillante” hallazgo de estos científicos estadounidenses, va a ser presentado en un simposio de investigadores de todo el mundo.

Fuente: BBC News

Crónica de la Ciudad de Gualeguaychú


Aprovechando que el dominio, (es decir, la dirección) de la página Web de Botnia en Argentina, estaba disponible, los asambleístas de Gualeguaychú crearon un sitio para informatizar su protesta contra las pasteras ubicadas en la costa uruguaya de Fraybentos.
En el sitio Web
www.botnia.com.ar se utiliza la información que podría provenir de la empresa, de una manera paradójica. Es así como se puede encontrar lo siguiente como presentación formal de la empresa:

"Somos una empresa finlandesa instalada en la República Oriental del Uruguay sobre las márgenes del Río Uruguay, en el límite con la República Argentina, siendo este río de soberanía compartida."

Pero además, pueden encontrarse los siguientes datos, ofrecidos de una manera bastante particular:

¿Por qué una empresa Finlandesa en América Latina?
En Botnia, creemos que Argentina y Uruguay son países que tienen mucho para dar: agua potable, plantaciones, y lo más importante, escaso control de la salud de la población (los enfermos o muertos por contaminación o accidente ambiental son de bajo resarcimiento económico).
La ley en Finlandia es muy estricta, y el sólo hecho de instalar una planta del tamaño de Botnia superaría el límite ambiental permitido. Un desastre ecológico de una pastera como la que instalaremos en Fraybentos, causaría daños irreversibles en Finlandia, y no queremos que eso suceda donde viven nuestras familias.
Por eso nos pareció mejor idea traerla a Latinoamérica, donde los políticos están más predispuestos a los negocios, la mano de obra es más barata y la gente bastante desinteresada como para pensar en el futuro de sus hijos.

Es una nueva propuesta, diferente, y donde se tiene la posibilidad de un acceso ilimitado. Como bien sabemos, las protestas en los medios de comunicación no aparecen por más de 2 meses (lo que dura un tema en “pasar de moda”), es por eso que la alternativa digital a una propuesta ecológica es un buen punto para la difusión masiva -la lucha por la ley de bosques de Greenpeace a través de la web es un buen ejemplo de conciencia informatizada-.
El sitio no solo cuenta con información en tono sarcástico, sino también con datos técnicos sobre las incidencias en la salud, el medio ambiente y sobre todo la ecología y geografía de los lugares involucrados, dejando entendido también que esta es una lucha a favor del medio ambiente y no en contra del pueblo de Fray Bentos.

Proponen también un apoyo a la protesta, tomando como icono una hoja verde, la cual quien quiera participar debe reproducirla en banderas, páginas Web, fotologs, remeras, estandartes, etc.; con la excepción de utilizar papel, ya que haciendo uso de este material se estaría fomentando la creación de nuevas fábricas pasteras.
Quién realice este apoyo, tiene también la posibilidad de enviar una foto con el trabajo que realizó y en el cual , por supuesto, se utilizó el símbolo que requería la consigna.
Una manera poco usual, pero una manera al fin de no abandonar la lucha.



Fuente: botnia.com.ar

sábado, 18 de agosto de 2007